Los astronautas que irán a la Luna piden a EE.UU. que no haya recortes para la NASA
Dialogaron con congresistas para defender la importancia de invertir en la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio.
Los astronautas que integraran la misión Artemis II y que viajarán en los próximos años a la luna pidieron este jueves, a los pies del Capitolio estadounidense, que el Gobierno no reduzca el presupuesto destinado a la NASA.
En estas semanas críticas porque republicanos y demócratas no llegan a un acuerdo sobre el techo de deuda, los cuatro astronautas que integrarán la misión (tres estadounidenses y un canadiense), visitaron este jueves el edificio donde se dirime el futuro económico más inmediato del país.
"Todos somos conscientes del contexto que se estaba debatiendo aquí y hemos venido para hablar sobre las virtudes del programa Artemis, sobre lo que estamos haciendo y también para expresar nuestra gratitud por el liderazgo y la visión que se ha demostrado hasta ahora y que nos ha traído hasta aquí", apuntó en una rueda de prensa Víctor Glover, quien será el piloto de la nave.
Para evitar que el Gobierno estadounidense entre en suspensión de pagos, el Congreso tiene que aprobar antes del 1 de junio una nueva subida del techo de deuda, que los republicanos condicionan a la reducción de varias partidas, entre las que podrían estar los fondos para la agencia espacial.
Los cuatro astronautas que integran la misión se han encontrado con legisladores y senadores para defender la importancia de invertir en la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA), la agencia del gobierno estadounidense responsable del programa espacial civil y de las investigaciones aeronáutica y aeroespacial.
"(Los legisladores) quieren seguir apoyándonos y saben lo importante que son las decisiones y los debates que se están dando ahora mismo para el futuro de la sostenibilidad y la ejecución de esta misión", añadió Glover, que será el primer estadounidense afroamericano en pisar la luna.
La misión de diez días alrededor de la luna tendrá como comandante a Reid Wiseman y como piloto a Glover, mientras que como especialistas de la misión irán la astronauta Christina Hammock Koch, la primera mujer que pisará el satélite, y Jeremy Hansen, éste último de la agencia canadiense.
Los cuatro formarán parte de la primera misión tripulada en el camino de la NASA para establecer una presencia a largo plazo en la luna, que será la primera misión en 50 años que retorna al satélite terrestre desde que culminara el programa Apolo, que entre 1968 y 1972 puso 12 astronautas sobre la superficie lunar.
Los astronautas estuvieron acompañados hoy por el administrador de la NASA, el exsenador demócrata Bill Nelson. "Ha sido extraordinario que republicanos y demócratas, que a veces estaban en desacuerdo, se unieran a lo largo de la historia. El programa espacial es una fuerza unificadora", afirmó.
Por eso "tenemos la esperanza de que se resuelva la situación del techo de la deuda", añadió. Y afirmó que cualquier reducción de gasto en las partidas de la agencia espacial, "el tipo de recortes de los que se ha hablado", serían "devastadores para la NASA" y los programas espaciales.
En la rueda de prensa también participó el exastronauta Mark Kelly, actualmente senador demócrata por Arizona, quien insistió en que hay que trabajar "para transmitir el mensaje y hablar sobre por qué estos programas son importantes".
"El éxito de la NASA es en gran parte atribuible a la visión y el liderazgo de los administradores de la NASA en las últimas tres administraciones y también a un apoyo amplio y bipartidista aquí en el Congreso", afirmó.
La NASA prevé que el envío de la primera misión tripulada del programa Artemis aterrice en el satélite en 2025.
Hasta entonces, detalló hoy Hansen, los astronautas trabajarán en adaptarse a la nave y a los equipos que están participando en la misión.
"Todavía no lo tenemos todo resuelto. Todavía estamos construyendo piezas (...) Encontraremos algunos problemas y los resolveremos juntos y así es como entrenamos para prepararnos, convirtiéndonos en expertos con el equipo en el terreno antes de irnos. Es una de las partes más emocionantes para un astronauta", narró.
Así, aunque los diez días alrededor de la luna "van a ser extraordinarios" y "ver la Tierra desde la perspectiva de la luna va a ser algo que tocará nuestras almas", el tiempo "entre ahora y el lanzamiento es igualmente mágico porque resolveremos desafíos difíciles con un equipo increíble sobre el terreno".
EFE